En el diario El País las
columnas de la contraportada son consideradas obras literarias y sus
autores tienen un amplio margen para expresar sus ideas, incluida la
ficción. Viene a cuento esto en relación a una columna que se ha
situado en las últimas semanas en “lo más visto” del elpais.com
(sólo en Facebook ha tenido más de 46.000 recomendaciones).
La columna en cuestión
se titula “El negro” y explica una seductora historia sobre
prejuicios. Trata de un comedor universitario alemán donde una joven
rubia aria se sienta con su bandeja de comida en una mesa pero
advierte que ha olvidado un cubierto, yendo de nuevo a buscarlo. Al
regresar, un joven negro con pinta de inmigrante, está comiendo su
comida. Condescendiente, aunque con alguna duda, comparte su comida
con el intruso de color que en todo momento permanece sonriente y
amigable. Cuando el muchacho se va, se da cuenta que su abrigo
descansa en la silla que tiene detrás en una mesa gemela con su
bandeja de comida intacta.
Fue escrita por Rosa
Montero nada menos que en mayo de 2005, sin embargo ahora, con el
poder de las redes sociales, ha resucitado con una fuerza inusitada.
En el momento de la publicación pasó prácticamente desapercibida y
su autora certificó que era auténtica. Aunque nada más aparecer en
el recuadro de “Lo más visto” comenzaron a llegar críticas y
mensajes de los lectores. Unos advierten que hay un relato similar de
Jorge Bucay titulado Galletitas. Otro se siente indignado por
“hacer pasar por verídica una historia tomada, casi literalmente,
de una obra de ficción”. Rosa Montero asegura que estaba
convencida que era cierta, se lo contó su editora alemana en un
viaje a Portugal diciendo que lo había leído en el periódico. “Me
equivoqué, creía que había ocurrido exactamente como la expliqué”,
añade.
Lo que está claro es que
ahora los lectores tienen en sus manos poderosas herramientas y, por
ello, hay que ser riguroso en el compromiso con el rigor y la
calidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario