miércoles, 17 de febrero de 2021

SUEÑO CON NUEVA YORK



Greenwich Village

Me he despertado debido a una luz fluorescente insoportable que estaba sobre mi cara. No era otra cosa que un sueño que he recordado parcialmente en ese instante. Estaba en una habitación durmiendo y esa luz se encendió a las cinco de la madrugada cuando un vecino de pieza utilizaba el baño. Se encendía cuando accionaba la del baño. A esas horas, en Nueva York, había un movimiento endemoniado de personas y vehículos que se preparaban para ir al trabajo o ya se dirigían a él. Preparé la traducción al inglés para decir al casero que tendría que solucionar el tema de la luz. 

El día anterior fue el primero que pisaba, en sueños, la ciudad de los rascacielos. Iba solo, había aprovechado un viaje barato y que la pandemia remitía en el mundo. Tenía ganas de viajar después de tanto tiempo sin hacerlo fuera de España y fue una oportunidad única. Pensé que viajar solo a una ciudad como Nueva York, por primera vez, era un reto y una experiencia inigualable. El taxi que tomé en el aeropuerto me dejó en un lugar que se llamaba Greenwich. Fue lo primero que vi. Se trataba de edificios bajos, similares a los de Londres, por ejemplo. Fue una sorpresa para mí.  


Al despertar de ese sueño viajero busqué en Google Earth “Greenwich- Nueva York” y existe un lugar que se llama Greenwich Village, concretamente un barrio. Rápidamente investigué sobre el lugar del sueño y se trata, según Wikipedia, de una gran área residencial en el lado oeste de Manhattan en Nueva York. El barrio está rodeado por la calle Broadway al este, el río Hudson al oeste, la calle Houston al sur y la calle 14 al norte. El Distrito histórico de Greenwich Village se encuentra inscrito como un Distrito Histórico en el Registro Nacional de Lugares Históricos  desde el 19 de junio de 1979. 

Originalmente el barrio fue un pueblo aparte,  creado en 1712. En 1822 , una epidemia de fiebre amarilla en Nueva York hizo que los residentes se mudaran a Greenwich Village en busca de su mejor aire. 


No conozco Nueva York ni he viajado nunca a Estados Unidos, siempre me ha dado miedo rellenar el formulario de solicitud ESTA del Departamento de Seguridad Interior. El objetivo del formulario es recopilar una importante cantidad de información, de forma que el Servicio de aduanas y protección de fronteras estadounidense pueda cruzar los datos del solicitante con las numerosas bases de datos internacionales policiales, terrorismo y viajeros no admisibles. Y, aunque ahora me dicen que las preguntas son más triviales, me da miedo confundirme en raza, por ejemplo, y poner blanco y no hispano, o que se me escape que el socialismo o el anarquismo son doctrinas aceptables desde mi punto de vista. Sin embargo, tengo unas ganas inmensas de ir, mucho más ahora que daría cualquier cosa por viajar libremente por cualquier lugar, la cultura musical, cinematográfica, artística... que ha aportado a mi generación Estados Unidos es mucho más importante que lo que ha hecho su política migratoria, por ejemplo, de los últimos años. Además, mi formación fotográfica hace que perderme por las calles neoyorquinas con una cámara en la mano sea uno de mis sueños. 

Pero, por el momento, todo queda en sueño. Espero que alguna vez pueda lograr viajar a Estados Unidos y no me cabe duda de que      Greenwich Village será uno de mis destinos a visitar. Los sueños lo merecen.
 

 

 
 

domingo, 7 de febrero de 2021

ELECCIONES EN CATALUÑA Y PANDEMIA



Foto: American Cancer Society

Me parece una barbaridad que haya elecciones en Cataluña o en cualquier lugar del mundo, nos hemos vuelto locos. La Generalitat decretó aplazar las elecciones autonómicas al 30 de marzo, pero el Tribunal Superior de Justicia concluyó que el aplazamiento vulneraba la Constitución al limitar el derecho de sufragio sin los requisitos de necesidad, idoneidad y proporcionalidad. ¿La pandemia no es motivo suficiente de necesidad en un país que limita otras muchas libertades? Resulta que la pandemia del coronavirus ha venido acompañada de amplias restricciones: confinamiento de los ciudadanos en casa, libertad de movimiento limitada, empresas cerradas... y en Cataluña, la ¿justicia? permite desplazarse a votar a todos y todas los ciudadanos y ciudadanas, incluidos los positivos por Covid 19. Y, claro, el número de alegaciones presentadas en las Juntas Electorales de Zona por los miembros elegidos para formar parte de las mesas no se han hecho esperar y ya superan los 21.000 recursos, uno de cada cuatro de los cerca de 82.000 ciudadanos que han sido elegidos para ser presidentes y vocales el 14 de febrero. 
Flaco favor ha hecho la ¿justicia?  a la seguridad de los miembros de la mesa en la prevención de los contagios y al resto de ciudadanos que participarán y tendrán riesgo de transmisión o propagación del virus. Toca recordar al TSJ que una de las recomendaciones de sanidad es “evitar las multitudes”, estar en espacios con aglomeraciones de personas como restaurantes, bares, gimnasios o cines aumenta el riesgo de exposición al Covid 19.  

No evolucionamos, seguimos siendo un país de charanga y pandereta, no merecemos los políticos ni los jueces que tenemos, o tal vez sí. Tengo ganas de que nos hagamos mayores, pero, mientras tanto, deberemos mejorar mucho en educación y en derechos fundamentales. 

 

 

 

 

 

LA VIDA PASA

“¡No hay naciones!, solo hay humanidad. Y si no llegamos a entender eso pronto, no habrá naciones, porque no habrá humanidad".   Isaac ...