
Desde hace varios meses veo en Zamora, concretamente en la céntrica calle Santa Clara, a dos hermanos gemelos que tocan el acordeón. Pero como vivo en Soria un buen día vi a uno de ellos tocando en el Collado. Me impactó. Pensé: no puede ser, es el mismo que veo en Zamora. Poco tiempo después estuve en Zamora y pregunté al muchacho que estaba tocando ¿es posible que te haya visto en Soria? Me respondió que era su hermano gemelo que decidió emigrar a otras tierras, en solitario, para poder deleitar (esto es cosecha personal) a un público distinto y ocasional, e intentar ir subsistiendo en una aventura tan dura como es tocar en la calle de un país desconocido.
Los hermanos Lagutik, Valery y Vitaly, son rusos y han estudiado durante muchos años en su país de origen, en la Escuela de Música y el Conservatorio. Consiguieron varios premios en el sur de Rusia e incluso aportaron su granito de arena enseñando música en la Academia Koetov, según me indica Valery, que lleva más tiempo residiendo en España que su gemelo Vitaly. (tienen otro hermano que ha cosechado más éxitos que ellos dos en su país, formando parte de una reconocida orquesta y con un clamoroso éxito de ventas con un disco que me ha enseñado, pero que al estar en caracteres rusos me ha sido imposible descifrar. No puedo, por tanto, dar más información). En definitiva, se trata de dos grandes músicos con una clara personalidad y, además, no les importa estar en la calle. Es más, les sirve para darse a conocer al gran público, que de manera sorprendente, escucha durante unos minutos, en su paseo distendido, obras de música clásica y otras versiones más populares y cercanas, a un músico callejero interpretando lo mejor de su repertorio con un instrumento tan diferente como es un acordeón.
Primero me puse al habla con Valery y le informé de los numerosos viajes que hacía entre ambas ciudades, Zamora y Soria, y me ofrecí a poder desplazarlos para visitarse. Más tarde, en Soria, dije lo mismo a Vitaly y en mi primer viaje a la ciudad avanzada en el Duero le invité a acompañarme. Vitaly, educadamente, rehusó la invitación y me pidió que le trajese a Soria unos enseres personales. Me dio sus teléfonos y llamó a su hermano para que lo preparase para traérselo a Soria. Hoy mismo quedé con su hermano. Tomamos un café y me invitó a su casa. Compartí con él unos momentos entrañables escuchando sus nuevos discos, grabados y puestos a la venta desde noviembre, con gran acogida por parte de su público. Después me endosó un gran baúl para su querido hermano “soriano”. Ahora mismo acabo de entregárselo a Vitaly, que muy agradecido recogió sus bultos.
Valery me regaló, por mi comportamiento, sus dos nuevos discos y los he escuchado. Me parecen un testimonio grandioso de su buen hacer y he de recomendarlos a mis queridos lectores.
En su casa zamorana me enseñó todas sus fotos familiares: sus esposas, sus hijos, su querida madre e incluso me invito a visitar Moscú y su próxima casa familiar (su madre la está construyendo) a treinta kilómetros de la capital rusa. En poco tiempo he entablado una relación maravillosa.
He buscado en Internet algunos datos sobre ellos y en un blog me he encontrado algunos detalles personales. Parece ser que Valery abandonó su ciudad debido a que la policía quería extorsionarle diciendo que tenía dinero, incluso le amenazó, si no les daba algún presente, con meter droga en su casa y denunciarle. Con mucha valentía abandono su país y decidió buscar una nueva vida en algún lugar donde poder cobijar a su esposa y tres hijos y emprender una nueva vida a cambio de ofrecer lo mejor de sí mismo: su música.
Hoy está junto a nosotros. Su hermano vino poco tiempo después a España. Ambos se han establecido aquí al igual que muchos inmigrantes que buscan algo mejor. Me parece meritorio su triunfo personal. Desde aquí quiero dedicar este emotivo y humilde homenaje a esas personas que tan sólo quieren vivir en libertad, sin ningún tipo de cadenas, ofreciendo lo mejor que pueden dar, en una sociedad que a veces es insolidaria y mide a todos por el mismo rasero: el rasero de la intolerancia y la discriminación.
Comentarios
jodete
Bienvenido a mi blog. Saludos.
Animo, a los dos hermanos a seguir,deleitandonos con su musica y su sonrrisa, cada vez que pasamos,por Santa Clara,en los frios inviernos y calurosos veranos