Isla Graciosa desde el Mirador del Río (César Manrique)
Parezco tonto (o tal vez lo sea), anoche, con
motivo de la edición soriana del “Enclave del Agua” -Se trata de un festival multidisciplinar dedicado a la música de raíz
afroamericana, del Blues del Delta del Mississippi al Hip Hop, a través del
Soul, Funk, Rhthm&Blues, Afrobeat, Reggae…- se me ocurrió la feliz idea de
coger el coche, desde mi casa hasta el río hay poco más de tres kilómetros.
Como quería hacer una visita a mis amigos Gloria y Nacho, que llevan el bar y
la terraza del antiguo fielato, ahora Centro de Recepción de Visitantes del Río
Duero, pensé, aparco allí mismo y me acerco andando al festival. Aquello estaba
imposible, coches aparcados en cualquier lugar, “bouchons” (atascos)… después
de vueltas y más vueltas, aparqué cerca de mi trabajo, casi tan lejos del río
como mi casa, oggggg. Pero mereció la pena, nada más aparcar, la magia de la
noche me sorprendió con la visión de dos lucecitas verdes pertenecientes a un
par de luciérnagas. En las noches cálidas, es posible ver a las luciérnagas hembras
iluminarse para atraer a los machos que sobrevuelan. Si se sienten amenazadas,
desactivan la luz. Generan luz mediante un órgano especial situado en la parte
inferior del abdomen.
Intenté coger una pero se cayó al suelo y era un zarzal. Me recordó a aquellas
noches que pasé en isla Contadora (Panamá) cuando paseaba desde mi hotel por la
isla y volaban cientos de ellas, es un espectáculo que no olvidaré jamás, me
parecía magia, era como si estuviera alucinando viendo esas lucecitas tan maravillosas
volar de un lado para otro. La segunda sorpresa de la noche fue encontrarme en
la terraza de Gloria con el tío de Nacho, nos conocemos de hace muchos años
cuando coincidíamos en “La Tetería” que regentaba entonces Gloria (allí tuve la
suerte de compartir hermosísimos momentos con casi todos los cantautores
españoles). Me contó que tiene un apartamento en La Graciosa. Le dije que
conozco bien las islas Canarias, mi hermano vivió allí seis años, en la Palma y
Tenerife, e iba a visitarlo y recorría, aprovechando el largo viaje, el resto
de las islas. La Graciosa está situada al noroeste de Lanzarote y forma parte
de un archipiélago de islas muy pequeñas que se llama Chinijo. Por desgracia no
tuve la suerte de pisarla, tuve que conformarme con verla desde el privilegiado
mirador del Río, en la isla de Lanzarote, diseñado por el artista de la isla César Manrique. Tan sólo tiene 29 kilómetros
cuadrados y dos pueblos: La Caleta del Sebo (donde tiene Vicente el
apartamento) y Casas de Pedro Barba. Estuvo contándome cómo es un día en la
isla, vive del turismo y la pesca. Vicente es un tipo campechano y tiene muchos
amigos en el pueblo que sólo cuenta con 600 habitantes. Él no es “godo” para
ellos, es “peninsular”, eso lo define todo. Su apartamento lo ha convertido en
dos, en uno de ellos vive y el otro lo alquila. Ya estoy en la lista. Me
comentó que a partir de noviembre se llena de alemanes y que una vez, estando
alojado en un apartamento, le rogaron que cambiara de lugar debido a que tenían
un invitado importante. Se trataba de un ministro alemán que era uno más en el
pueblo, pasando totalmente desapercibido. Qué maravilla, pensé.
1 comentario:
¡¡Las luciérnagas!! son de color verde fosforescente por la parte del abdomen y en sus últimos segmentos si son hembras, son como una linterna mágica. Las descubrí en el camping de Quintanar de la Sierra con mi padre de pequeña, me entusiasmaron tanto que me tenía que dar un tiempo para quedarme contemplandolas y sintiéndolas en mis manos.
¡¡Así que puedes dormir tranquilo que no estás tonto!!
Un abrazo.
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